martes, 27 de septiembre de 2011

Primavera Postiva

ESTE ES UN POST POSITIVO

Basta de quejarse por la falta de tiempo. Basta de quejarse por el trabajo o la falta de él. Es primavera y estoy contenta.
Posiblemente mañana todo me prezca una mierda, pero hoy estoy optimista, asique asi escribo. Escribo y bailo con la cabeza un tema de Little Joy y como tostadas con un invento que hice parecido al humus pero que no es humus, porque mi minipimer se quemó ayer cuando mis garbanzos estaban listos, pelados y condimentados para hacerse humus.
En cambio se hicieron humo. Va . . . yo vi humo. Era mi minipimer. Respiré profundo y pensé que bueno, que mañana compro otra total son baratos esos chiches y yo la uso mucho.
Hoy me levanté a la mañana para supervisar trabajos, bastante temprano. Al menos mas de lo que deseaba. Parecece que el espítitu primaveral se apoderó de mis alumnos. Faltarn todos. Los cinco. Me levanté al pedo.

Bueno . . . Respiré profundo y pensé que bueno, que aprovecho la mañana para ponerme al día con los quehaceres domésticos (sí sí, acabo de decir quehaceres domésticos, y no tengo ochenta y cinco años).
Agarré la bota descocida que debía llevar a la zapatería, y me dispuse a buscar un nueva minipimer.

Primer escala: un fracaso. Las minipimer no se están importando hace tres meses. OBVIO. ERA OBVIO. Yo tengo la mia hace años... no se iba a romper a menos que la maldita importación de minipimers estubiera parada. Respiro. No importa. . . ya vendrán los tiempos de las minipimers nacionales (espero que pronto)


Escala dos: (Aquí es donde comienza el optimismo) El sábado pasado había llevado mis botas negras a arreglar ya que se habían desocido después de años de uso. Son mis preferidas, asique decidí intentar arreglarlas. 
Fui al señor zapatero. 
Me atendió muy pero muy bien, muy pero muy económicamente, muy pero muy amablemente. Un amor. Su zapatería se llama EL BUEN HUMOR. No es joda. Asi se llama. Y el tipo se ve que le pone un empeño al buen humor que conmueve. Un buen humor copado, igual. No esos buenos humores fingidos que dan ganas de golpear al que los porta. No un buen humor general, sin escencia. Un buen humor bueno. Un buen humor posta.
Yo me fui contenta y con mi arreglo, pero a menos de una semana, el bordecito de uno de mis zapatos comenzó a despegarse nuevamente.

UUUUUUUUUUUUUHHHHHHHH. Me chiflé. Quiero reconocerlo publicamente. Me chiflé. Me sentí estafada por su bueno humor, me puse como el orto, y del orto. Y como estaba tan atravesada esperé antes de llevarle los zapatos.
Entonces (aquí es donde volvemos al tiempo presente) hoy, sin minipimer, sin supervision, con sueño arranque hacia la zapatería. Yo sabía que no era el estado adecuado para hablar con el zapatero, pero bue... era lo que había . . . nunca tengo las mañanas libres.
Llego y yo: HOLA, y el (con sonrisa gigante) HOLA y yo COMO ESTAS? y él . . . él me contesta, cosa que de entrada uno no espera. Preguntar COMO ESTAS? y que te respondan no sucede a menudo. Entonces yo dije COMO ESTAS pero iba a seguir hablando, le iba a decir que estos zapatos yo los había traído y él no los había arreglado bien pero me interrumpe y me responde BIEN, MUY BIEN, CON ESTE DIA, UD? COMO ESTÁ? . . .
Me sentí como el orto. Me sentí una basura de persona, una basura aporteñada, que pregunta como estas para hacerse la copada y que no espera que el otro responda. Entonces en el medio de la superposición entre mi reclamo y su respuesta y pregunta, yo pensaba soy una mierda de persona a la que le chupa un huevo su comunidad (ahora lo escribo y suena exagerado. Posiblemente sea exagerado) y entonces para revertir lo miré (porque hasta ese momento no lo había mirado a los ojos) entonces lo miré y le contesté que BIEN, QUE SÍ, ES UN DIA MUY LINDO PORQUE ESTÁ MAS FRESQUITO. Y QUE BUENO, QUE LE DECÍA DE NUEVO QUE UNO DE LOS ZAPATOS NO HABIA QUEDADO BIEN... claramente  mi tono había cambiado. Yo que soy como una cacatúa luchando por los derechos del consumidor, de repente ya no daba por sentado que el señor seguro me había querido cagar, y él mira el zapato y AH, CLARO. SE ME PASÓ ARREGLARTE ACA. PASÁ MAÑANA. 
Y no me cobró.
. . . 
. . . 

Me puse de buen humor. De un evidente buen humor que incluía sonrisa caminando por la calle. Nó por la plata, porque no me haya cobrado, sino porque fue hiper simple la cosa: el tipo te habla bien, hace que uno quiera hablarle bien, y el se predispone mejor a esuchar lo que tenés para decirle. Un genio. Aplauso cerrado para el zapatero de EL BUEN HUMOR. 

Mi sonrisa y yo llegamos a la esquina y nos encontramos con la chica que vende flores. Me compre una Santa Rita muy barata, y muy bonita.
Ahora estoy contenta.
Aun a pesar de que, mientras escribía este post, se quemó mi tostadora. Ja. Es en serio. 

0 comentarios:

Publicar un comentario