jueves, 25 de agosto de 2011

Terminar el dia...

Aquí de nuevo...
Es que el día comenzó raro, asique para redimir (me) organcé plan de último momento.
No hay nada mas lindo que los planes sin organización previa. Los que salen asi como asi. Y en esta ciudad ser espontáneo es difícil, sobre todo cuando la agenda es apretada y las distancias largas.
Pero tenía dos horas y media por la tarde. Y un amigo (casi) dispuesto a embarcarse en mi aventura.
Andaba por el barrio de Belgrano (reunión con poco éxito) cuando miré el reloj y calculé el tiempo que tardaría en llegar hasta La Giralda para tomar un Chocolate espeso con churros. Sí. Lo de "espeso" suena horrible, pero así dice en el menú. Y ciertamente, es espeso. Como una sopa de chocolate.
Si tomaba el subte y no me distraía con vidrieras o librerías (las ofertas de final de temporada) alcanzaba perfecto.
Me llevó un par de mensajes de texto convencer a un amigo, pero lo conseguí.
Las obligaciones continúan en media hora, pero después de una breve pero animada charla con chocolate de por medio, ya estoy lista para seguir, felíz y calentita.
La Giralda queda en Av. Corrientes y Uruguay -mas o menos a mitad de cuadra, en la cuadra siguiente al Teatro San Martín yendo hacia 9 de Julio-. Es caro pero riquísimo.
Un lujo para un dia que no comenzó bien.
Ahora sí.
Buenas Noches

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